Casademont Zaragoza ha llegado a un acuerdo con Alimerka Oviedo para la cesión del joven Lucas Langarica, que volverá a la que fue su casa tras no contar con las suficientes oportunidades en territorio aragonés. Regresa así al club que le dio la opción de formarse en categorías inferiores, lo cual facilitará la rápida adaptación a la ciudad y al equipo.
La cesión de Lucas Langarita al club ovetense es un win-win para las dos partes. El jugador conseguirá aumentar la cantidad de minutos por partido y el equipo se refuerza con uno los mejores jóvenes del país. Hasta la fecha, el maño está registrando menos de 7 minutos por encuentro en Liga Endesa. En FIBA Europe Cup se marcha hasta los casi 10, registrando 5.6 puntos y 1.6 asistencias, lo cual son números más que decentes, pero a priori insuficientes para seguir creciendo.
Por su parte, Alimerka Oviedo se encuentra en la parte baja de la Primera FEB con solo tres victorias en nueve partidos. Poder contar con un jugador como Lucas Langarita, que ya ha cosechado éxitos como el subcampeonato mundial Sub-17 y el oro en el Mundial Sub-19, es un grandísimo valor para el club. De hecho, en el campeonato logrado por la Selección en 2023, el maño promedió 10.7 puntos, 3.7 rebotes y 3.3 asistencias, evidenciando sus grandes capacidades especialmente en ataque.
Una gran oportunidad
A modo de bendición, el propio entrenador de Casademont Zaragoza, Porfi Fisac, ha mostrado la satisfacción en el movimiento con respecto a su jugador: «Creo que es un sitio bueno para que Lucas tenga la oportunidad de contar con minutos y deseo toda la suerte del mundo para él, que le salga francamente bien. Allí tendrá un muy buen entrenador, Javi Rodríguez, un hombre que conozco bien de sus años en ACB».